La Iglesia de San Lorenzo es una de las más especiales de Pamplona. De su pasado medieval apenas quedan restos, y su verticalidad inicial también ha ido disminuyendo con los años debido a los cambios sufridos en la estructura. La nave actual data de 1805, aunque la fachada tuvo que rehacerse en 1901 debido a un bombardeo. Además de su historia, otro de los motivos que hacen de esta iglesia un lugar especial es la Capilla de San Fermín. Aquí se encuentra la imagen del conocido Santo pamplonés, que ubicado sobre el altar, constituye uno de los principales atractivos de la ciudad.
Durante las fiestas de San Fermín se realizan en la Capilla numerosos actos religiosos y son muchas las personas que se acercan a visitar al Santo, que cada 7 de julio abandona su hogar para salir en procesión. Las calles se llenan para ver y rendir culto a San Fermín, que recorre los lugares más emblemáticos de los tres núcleos que conformaban la vieja Pamplona.
Sin embargo, y aunque las fiestas sean las fechas más señaladas, cualquier día del año es un buen momento para conocer la Capilla de San Fermín. Existen asimismo otras fechas especiales, como, por ejemplo, el 25 de septiembre. Coincidiendo con las fiestas de San Fermín Chiquito, se celebra en Pamplona el martirio de San Fermín, y por consiguiente tienen lugar en San Lorenzo diferentes actos religiosos.
Además de las festividades señaladas, la Capilla de San Fermín ofrece numerosas actividades: bodas, bodas de oro y plata, bautizos, objetos de San Fermín, Museo de San Fermín, beso al Santo, misas a San Fermín, columbarios en la Capilla de San Fermín para cenizas de difuntos, despedida a San Fermín, la asociación Corte de San Fermín, donativos para el culto de San Fermín y exposición del Santísimo.
Tal y como hemos comentado, estamos ante un lugar especial. Es por ello que son muchas las personas que desean celebrar aquí su boda. Aunque este año la demanda sea algo menor que la del año pasado, las cifras siguen siendo muy elevadas. Esto lo sabe bien D. Francisco Javier Leoz, párroco de la Iglesia de San Lorenzo: “La demanda es un poco menor que el año pasado, porque el año pasado tuvimos la suma de los años de la pandemia más la suma de 2022. Este año los parámetros son parecidos, en torno a unas 70 parejas al año que se casan principalmente los sábados e incluso viernes”. Tal y como dice el párroco, “es el templo donde más enlaces matrimoniales hay en toda Navarra y en el conjunto nacional es también de las iglesias más emblemáticas”.
La tierra tira mucho, por lo que la mayoría de parejas que se casan en la Capilla son de Pamplona y Navarra. Sin embargo, también existen casos excepcionales, gente que tiene devoción a San Fermín y que opta por este lugar para celebrar uno de los mayores acontecimientos de su vida: “Por ejemplo, ahora tenemos una pareja de Emiratos Árabes que se va a casar aquí próximamente”, cuenta D. Francisco Javier Leoz.
La fuerza de la Capilla de San Fermín es innegable. Un atractivo religioso y turístico sin igual en Pamplona que ya se está preparando para las fiestas, y especialmente para el 7 de julio, su día grande.