La siguiente aparición de las fiestas, en concreto de nuestra Plaza de Toros, es en una película de los que aquí conocimos como el Gordo y el Flaco: Stan y Oliver toreros (1945), dirigida por Malcolm St Clair. La verdad es que hay que tener “ojo de halcón” para ver el momento… Al final de la película, donde pueden imaginar que nuestros actores hacen de las suyas, Stan, el flaco, aparece toreando en la plaza de México DF. Por unas circunstancias de la corrida, piden que se suelten los toros y es, en ese momento, cuando aparecen unos segundos de unas imágenes documentales de la llegada de los astados del encierro a la Plaza de Toros de Pamplona y la posterior suelta de vaquillas.
Realmente no es una aparición muy memorable, ni siquiera la IMDB, la web por antonomasia del cine, nombra en sus “filming location” nuestra breve aportación.
Se produce en este momento un salto tanto en el tiempo como cualitativo, ya que la siguiente película es de 1957 y parte de su historia transcurre durante las fiestas: Henry King lleva a la pantalla The Sun Also Rises o, como la conocimos aquí, Fiesta. La novela de Ernest Heminghway, publicada en 1926, hizo que San Fermín fuera conocido en todo el mundo, o lo que es lo mismo, en Estados Unidos. Aún estamos pensando si darle o no las gracias…
Los protagonistas de la historia son los veteranos de la Gran Guerra (aún no podían llamarla I Guerra Mundial), que buscan olvido de lo pasado y deciden que el mejor lugar es Pamplona del 6 al 14 de julio. El autor conocía bien la ciudad, sus restaurantes y sus bares, sobre todo durante sus más famosos días.
Los que pusieron rostro a la historia fueron grandes estrellas como Tyrone Power, Ava Gardner, Errol Flynn, Mel Ferrer… que curiosamente no pisaron Pamplona para rodar la historia. Seguro que Ava Gardner hubiera disfrutado como la mejor PTV…
La película fue enteramente rodada en México. Los planos totalmente reconocibles de las fiestas de Pamplona fueron planos de relleno realizados por una segunda unidad. Tal vez por eso las imágenes, a los que conocemos un poco la fiesta, nos resulten un tanto “extrañas” e increíbles, sobre todo en algunos momentos: correr un encierro mientras uno bebe de una bota creo que aún no lo hemos visto…