En el primero de los encierros de 2018, los toros de la ganadería salmantina de Puerto de San Lorenzo han protagonizado una carrera emocionante desde el primer momento. Nada más comenzar la carrera, en el tramo de la cuesta de Santo Domingo, uno de los morlacos ha corneado en el glúteo a un corredor (E.S.D. 38 años. Menos grave), de Sarriguren (Navarra). Otros cuatro corredores han sido trasladados al complejo hospitalario con sendas contusiones, dos en el tramo del Ayuntamiento, uno de nacionalidad canadiense (M.M.O. de 20 años. Leve) y otro de Pamplona (A.D.A. 22 años. Leve). Dos más han sido trasladados por traumatismos, un varón con iniciales D.C.O.,40 años, de Pamplona y pronóstico grave, en Santo Domingo; y I.M.R. 34 años de Castejón (Navarra) por un traumatismo en telefónica, con pronóstico leve.
Los astados han tardado dos minutos y treinta y siete segundos en completar el recorrido. Dos de los toros han quedado rezagados desde el inicio, tras caerse uno de ellos cuando empezaba el adoquinado en Santo Domingo. Pese a este percance, ambos toros, sin la guía de cabestros y descolgados de la manada, han hecho una carrera rápida y sin desvíos. Los cuatro primeros junto a los cabestros han atravesado Estafeta a toda velocidad, prácticamente en fila india, llegando uno de ellos a perder contacto con el resto, por lo que durante casi la totalidad del tramo la manada ha corrido bastante disgregada. Los espacios que se han creado entre los animales han propiciado la posibilidad de ver bonitas carreras de un buen número de mozos simultáneamente.
En el callejón y al entrar en la plaza, un par de caídas de corredores hicieron que se mantuviera la emoción hasta el último instante. Este primer encierro ha resultado veloz, emocionante y vistoso, gracias a los toros de Puerto de San Lorenzo que en su segunda visita consecutiva a las fiestas han repetido el comportamiento del año pasado y se han mostrado rápidos y decididos.
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