Desde el 1 de junio los operarios de la Carpintería Hermanos Aldaz están llevando a cabo las labores de montaje del vallado para los encierros, una vez realizados el repaso y la organización del conjunto de 900 postes, 2.700 tablones y 2.500 cuñas para encajar los postes que componen esta barrera de seguridad. Cada año hay que renovar aproximadamente un 2% de este material, pino silvestre autóctono con certificado PEFC, debido al deterioro de la madera.
Como ya es tradicional, el montaje del vallado comenzó en el tramo entre los Corrales del Gas y los Corrales de Santo Domingo, correspondiente a los 300 metros del ‘Encierrillo’. Previamente al inicio del montaje del vallado, los empleados de limpieza vaciaron los cajetines de hormigón con tapa de metal, conocidos como “dados”, donde encajan los postes. Cada elemento del doble vallado del encierro se instala siempre en el mismo punto gracias a una combinación de números y letras marcada con pintura. Además del vallado propiamente dicho, en el recorrido del encierro se instalan cerca de 70 puertas de diversos tamaños, tanto de evacuación como de cierre del recorrido, que permiten el paso entre el recorrido del encierro y el exterior a personas, ambulancias y máquinas barredoras e impiden el retroceso de las reses.
Las labores de colocación del vallado continuarán durante todo el mes de junio a lo largo de los 846 metros de recorrido del encierro, hasta que la estructura de seguridad quede cerrada definitivamente el día 6 de julio, con la instalación de los tramos de parte de las calles Amaya y Estafeta. La Policía Municipal informa regularmente a los vecinos que se ven afectados en cada tramo, para que puedan retirar sus vehículos.
La Carpintería Hermanos Aldaz de Puente la Reina se encarga desde el año 1992 del montaje y desmontaje parcial del doble vallado entre el 7 y el 14 de julio, una operación en la que intervienen entre 70 y 75 personas y que tiene lugar de manera muy rápida una vez que finaliza el encierro para permitir la vida normal de la ciudad durante el resto del día. El último día de las fiestas, el 14 de julio, 90 personas desmontan y recogen el vallado completo.